Darío, el noble

Desde pequeño su padre, Césaro, miembro del Consejo de Nobles, se ha preocupado para que recibiese una educación propia de su clase social.
Es un idealista que defiende con ímpetu sus creencias. Además de culto, caballeroso y educado, Darío es un hombre mujeriego, dispuesto a meterse en cualquier tipo de problemas con tal de tener una mujer al lado.
Está educado para tomar decisiones, para ser un gran orador, para dirigir un pueblo… pero no para matar con sus propias manos ni para vivir a la intemperie como lo hace Viriato.